La Unión Europea (UE) ha puesto en marcha una serie de iniciativas denominadas PPPs (en inglés Public private partnerships/Consorcios público-privados). Se encuentran incluidas dentro el Plan de Recuperación Económica que la UE lanzó en noviembre del año pasado.
Este Plan propone diferentes acciones para desarrollar tecnologías limpias para sectores como automoción, construcción y fabricación.
La UE lo ha definido como “un apoyo a la innovación en los sectores de fabricación, construcción y automovilístico, cuya demanda ha caído en picado a consecuencia de la crisis y que deben enfrentarse a los desafíos que supone evolucionar hacia una economía verde, por lo que se lanzan estos tres consorcios entre los sectores público y privado”.
CONSTRUCCIÓN _“Edificios europeos energéticamente eficientes” para promover las tecnologías verdes y el desarrollo de sistemas y materiales energéticamente eficientes en edificios nuevos o renovados con la intención de reducir radicalmente el consumo de energía y las emisiones de CO2.
FABRICACIÓN _“Fábricas del futuro” para ayudar a los fabricantes europeos del cualquier sector, en particular PYMEs a adaptarse a las presiones competitivas globales, incrementando la base tecnológica de la fabricación europea por medio del desarrollo e integración de tecnologías de futuro, tales como tecnologías de ingeniería para máquinas adaptables y procesos industriales, TIC y materiales avanzados”.
AUTOMOCIÓN _“Coches Verdes europeos” (en inglés European Green Cars), para integrar la investigación en una amplia gama de tecnologías y las infraestructuras de energía inteligente esenciales para alcanzar un gran avance en el uso de fuentes de energía renovables y no contaminantes, en la seguridad y en la fluidez del tráfico.
Las tres líneas pretenden combinar la prevención de la crisis con los intereses de la UE a largo plazo y principalmente con la necesidad de invertir en su futuro.
Investigación e innovación son considerados estratégicos e inversiones “inteligentes” para preparar una buena base de futuro a la economía de la UE que pueda así convertirse en una economía eficiente, ecológica y basada en el conocimiento. Se trata de una cuestión crucial para que la UE se haga más fuerte frente a la crisis, siendo así más sostenible y competitiva.
De este modo, se proponen medidas para impulsar los esfuerzos de investigación y las inversiones directas en los sectores industriales más afectados por el brusco descenso económico y que también tengan un gran potencial para alcanzar una economía más verde.